La empresa láctea recibe el premio al ‘Proyecto Internacional’ de Grupo Tribuna por su conquista de fronteras con productos de Castilla y León.
Exportar mundialmente y seguir trabajando con el mismo ‘mimo’ y dedicación que en los inicios no siempre va de la mano. Sin embargo, Quesería La Antigua es el ejemplo de que se puede llevar una empresa ‘familiar’ a lo más alto sin perder la calidad e identidad de siempre.
En 1994, un pastor, Fernando Fregeneda y Jesús Cruz, relacionado con el mundo lácteo, crearon su sueño de un empresa dedicada a la venta de leche en Fuentesaúco (Zamora). La empresa dedicada a la comercialización y recogida de leche de oveja de Castilla y León, comenzó en el año 2002 a elaborar quesos, y veinte años después la que un día fue una pequeña empresa ‘familiar’, exporta a más de 15 países de la Comunidad Económica Europea y han conseguido llegar a más de treinta países de todo el mundo.
Es por ello que Grupo TRIBUNA decidió otorgar el Premio Legado en la categoría de ‘Proyecto Internacional’ a este proyecto. El director de TRIBUNA Valladolid, Félix Ángel Carreras, señala «desde Tribuna pretendemos poner en valor la capacidad de cruzar fronteras con un proyecto creado y desarrollado en Castilla y León pero que ha conseguido conquistar otros mercados muy diferentes al nuestro».
Apuesta por el futuro
Su objetivo no es otro que el de seguir creciendo en el mercado del queso en todo el mundo, y es por ello que se adaptan digitalmente. Quesería la Antigua cuenta con todas las redes sociales propias en varios países en los que trabaja. Tienen claro que para poder mantenerse en el mercado se deben adaptar a los gustos de los consumidores creando nuevas variedades y formatos.
En su búsqueda por incrementar el valor añadido de la empresa, han comenzado una nueva aventura en Fuentesaúco. «Nuestro objetivo es intentar que los turistas vengan aquí a conocer nuestra fábrica, y también las experiencias que estamos creando alrededor del queso«, explica Fernando Fregeneda, uno de sus creadores. Un hecho que pone en valor también la labor social que cumple la empresa con su entorno tratando así de dinamizar el pueblo y la zona.
Han apostado también por nuevos proyectos, como La Antigua Educa, que organiza talleres en los que enseñan en colegios y escuelas de hostelería el proceso de elaboración de sus quesos artesanales. Sin duda, Quesería la Antigua es un ejemplo de como un trabajo de calidad y un visión empresarial pueden convertir el ‘sueño loco’ de dos visonarios en una empresa de éxito mundial.